Contiene: vela hechas de cera natural y pura, sin parafina ni ningún otro petroquímico. Su perfume procede de aceites esenciales. El vaso que las contiene es de cristal soplado a mano y su etiqueta y envoltorio diseñados e impresos por el último tipógrafo tradicional que queda en París.
Cada vela de Astier de Villatte propone un viaje a un lugar emblemático a través de su aroma. Anchorage te lleva al asfalto helado del aeropuerto, perdido entre el océano y los picos nevados. Del frío de las tierras circundantes, que se están descongelando rápidamente, ya surgen olores verdes y amaderados, de plantas silvestres y de resinas. Contiene esencias de anís estrellado, artemisa, ajenjo, salvia, cedro de Virginia y pachulí.